Google vuelve a sorprendernos con una nueva iniciativa. La compañía pretende crear una red de globos aerostáticos que proporcione acceso a Internet. La prueba se llevará a cabo en Christchurch y Canterbury, dos pueblos de Nueva Zelanda. El éxito del experimento solucionaría los problemas de acceso a Internet existente en dos tercios de la población mundial.
El proyecto surge de Google [x], el hipersecreto de Google del que han emergido, entre otros, las lentes Google Glass y los autos autónomos, capaces de distinguir obstáculos en el camino.
Conexión a través de globos a áreas carentes de infraestructura
El proyecto consiste en una “red de globos en el cielo”, de cuya interconexión surge la capacidad de dar acceso a Internet a regiones que carecen de la infraestructura necesaria, ya sean zonas rurales, aisladas geográficamente o afectadas por catástrofes naturales. Los globos permiten a los ciudadanos a acceder a la red mediante antenas especiales.
Los globos alcanzan 15 metros de diámetro, constan de paneles solares que los nutren de los suministros energéticos renovable y no contaminante, y con la tecnología necesaria como para establecer conexión con las bases terrenas, con los otros globos y con las antenas de los usuarios.
«Descubrimos una forma en que podemos cambiar la altitud de nuestros globos, haciendo que suban o bajen para atrapar distintos vientos, utilizamos simplemente aire y luz -comentó DeVaul-. Y no solamente una o dos veces, sino en forma continua durante todo lo que dure el vuelo, permitiéndonos guiarlos a dónde hay estaciones terrena de Internet. Además, se trata de coreografiar el movimiento de toda una flota de globos. Uno no puede planificar sólo uno, sino que debe planificar toda la flota global de globos al mismo tiempo. Para resolver este problema tuvimos que desarrollar un nuevo sistema computacional y, por supuesto, utilizamos los recursos de Google”.
Los globos son capaces de emitir señales de Internet a la Tierra a velocidad similar a las actuales redes 3G o más rápido.
Suspendida en la estratosfera, la futura flota de globos aerostáticos hará uso de la energía que la reportarán los paneles solares para subir o bajar en busca de las corrientes de aire que los desplazarán -en el caso de la actual experiencia, por el paralelo sur 42°-, de forma tal de estar siempre interconectadas con las bases terrenas de Internet y con sus beneficiarios. En perpetuo movimiento, los globos (que poseen una autonomía de vuelo de 100 días, luego de los cuales pueden ser reciclados) se desplazarán a lo largo de un paralelo, ya que en la estratosfera los vientos tienden a soplar en dirección oeste-este, en forma paralela al Ecuador.