Estar presente en Internet ya no es suficiente, hay que escuchar, saber que se dice de nuestra marca, con qué tono se está diciendo y dónde, porque conocer lo que se está diciendo de nosotros se ha convertido en una necesidad.
Monitorizar nuestra imagen de marca en Internet nos ayudará a tener un control inicial de la relación que nuestra marca está creando con nuestros clientes o cómo están entendiendo nuestra forma de comunicar. Incluso en qué lugar estamos comparándolo con el resto de empresas de la competencia.
Para ello es importante contar con herramientas que detectarán la repercusión de nuestra actividad, pero no sólo es fundamental detectar y localizar las opiniones, si no que también es preciso interpretar esos datos.
Gracias a la monitorización es posible detectar el sentimiento que tienen los internautas hacia nuestra marca, y en el caso de que ese sentimiento sea negativo, podemos solucionar una crisis antes de que llegue a causar un enorme daño a nuestra reputación. Igualmente puede detectar la acogida de nuevos productos o servicios.
La monitorización en Internet puede ser también utilizada para tantear y detectar a posibles clientes por medio de los términos que más identifiquen el sector al que pertenecemos.